Según un estudio psicológico recientemente publicado por la Universidad de Toronto (Canadá), el secreto para tener una vida sexual feliz en nuestras relaciones a largo plazo, reside en creer que la satisfacción sexual en pareja es algo que precisa de trabajo y esfuerzo.
A pesar de ello, no es extraño que muchos consideren que la satisfacción sexual llegará simplemente cuando encuentren a su media naranja. Esta idea fue siempre muy alimentada por Hollywood, mientras que el concepto de felicidad plena junto a una pareja, ya venía siendo engendrado desde la niñez con las historias perfectas de Disney.
Esta tesis canadiense en la que participaron unos 1.900 heterosexuales y homosexuales, pregona que tienen más posibilidades de una vida sexual feliz y duradera, quienes crean en la necesidad de trabajar en ello, de conocer al otro y de conocerse a sí mismos, de experimentar.
Por el contrario, estarán aquellas que se limitan a confiar en el destino y en que por el mero hecho de creer que están frente a la pareja perfecta todo funcionará bien en la cama desde el principio.
Según Jessica Maxwell, estudiante de doctorado en el departamento de Psicología de la Facultad de Artes y Ciencias, la gente que busca el crecimiento sexual, “no solo cree que puede trabajar en sus problemas sexuales, sino que no permite que estos afecten a la satisfacción que sienten por su relación de pareja".
Maxwell también recuerda que la fase de luna de miel dura entre dos y tres años, pero aquellos que tienen fe en el crecimiento sexual pueden superar las fluctuaciones que comienzan tras esa romántica primera etapa: "Tu vida sexual es como un jardín, necesita ser regada y nutrida para mantenerla".
Paradójicamente, aunque las mujeres son más proclives a consumir historias románticas y de almas gemelas a través de la literatura, el cine o la música, el estudio revela que son más propensas a creer que las relaciones sexuales de pareja en una relación a largo plazo, requieren de esfuerzo.
