La familia de Diego Gómez plantea dudas sobre las circunstancias de su muerte
El pasado 1 de mayo, el marino paraguayo Diego Manuel Gómez, desapareció tras caer a las aguas del Río Paraná desde un remolcador. El joven de 26 años era parte de la tripulación de la embarcación paraguaya “Patricia M” de la Compañía Marítima P&O. La versión que le dio el capitán Elvio Fernández a la familia es que el joven se levantó durante la madrugada y se lanzó al mar.
Carlos Gómez (primo del fallecido) descartó que su pariente haya tenido algún síntoma de depresión que lo llevara a tomara semejante decisión y denunció que la tripulación no cumplió con el protocolo establecido para dichos casos. “Al día siguiente (de que Diego cayó) zarparon como si nada. Fue un abandono brutal de parte de la tripulación”, manifestó a Radio Ñanduti. Añadió que no recibieron explicación alguna de los responsables.
Explicó también que tras un relevamiento de sus mensajes de WhatsApp, concluyeron que se lo notaba alegre y bromista.
Gómez declaró además que la autopsia realizada en Buenos Aires, fue muy poco clara. “Según videos de los pescadores que le encontraron, él tenía cortes y golpes y en la autopsia ni salió nada de eso”.
Incluso, dijo que el cuerpo de Diego llegó a Paraguay “en pedazos. Sin cabeza, sin cerebro, sin lengua”.
Gómez no ocultó sus dudas respecto a las circunstancias de su muerte y adelantó que seguirán adelante con la investigación, hasta llegar al fondo dl asunto.
Carlos Gómez, primo de Diego Manuel Gómez, tripulante paraguayo muerto ahogado en aguas internacionales, denunció que tras la autopsia realizada en el vecino país, el cuerpo de su pariente llegó a Paraguay en pedazos. Los familiares sospechan que la tripulación lo abandonó.
