Más de 70 consultores políticos de 14 países; Argentina, México, Colombia, Ecuador, Bolivia, Chile Perú y Guatemala, entre otros, y una ventana de ciudadanas con experiencia en el ejercicio público; cargos de elección popular municipal, regional y nacional, hicieron una lectura sobre el papel de los partidos políticos, las causas de los jóvenes y la comunicación de Gobierno, como eje de desarrollo democrático, en medio de la emergencia sanitaria del Covid-19.

Los conferencistas encabezados por la argentina Sandra Dellara,Directora del Primer Congreso Mundial de Mujeres Políticas, indicaron que las instituciones del Estado en América Latina, Estados Unidos, Europa y Asia deben ampliar la participación ciudadana y trasparencia, con una permanente rendición de cuentas, como una fórmula de salir al paso de la corrupción.

“Las mujeres en red, son un actor de cambio, para enfrentar la pospandemia, que no tiene receta”, señaló Dellara, durante el debate virtual, que concluyó con un encuentro con mujeres con diálogo sobre la experiencia en cargos de elección popular, bajo el poder de la palabra y una mirada de su protagonismo en la construcción de la democracia.

Los consultores colombianos Andrés Lizarralde y Carlos Villota Santacruz, coautores del libro “Gobierne bien y hágalo saber”, proponen que “las mujeres, siempre piensan en cómo construir una justicia social. Es una inspiración a nivel mundial, en particular en América Latina”.

Más adelante, la consultora Alma Bravo de México y Harvey Restrepo de Colombia recordaron que “siete mujeres desde el Gobierno, han marcado una diferencia gerencial en el manejo de pandemia”, como Ángela Merkel de Alemania, que en sus palabras, quedará registrada en la historia de la segunda década del siglo XXI: “Trabajó en el ser. Generó paz. Apoyo a los ciudadanos y ciudadanas. Su energía femenina, hizo posible defender la vida, al igual que sus pares en Islandia, Taiwán, Noruega y Nueva Zelandia”.

También el consultor Orlando González de Venezuela y con raíces portuguesas, hizo un repaso integral a la comunicación de Gobierno, desde la óptica de las nuevas tecnologías, entre ellas las redes sociales: “La comunicación política no se puede detener. La interactividad sea hace indispensable en cuarentena, para prepararnos como sociedad para la pospandemia”.

En esa línea de acción, en palabras de Marcos Castro Martínez, reducir la brecha social desde la construcción de políticas públicas, es esencial e inaplazable. “Necesitamos generar el más número posible de mujeres en Gobierno, como agentes de cambio. Son las mujeres, los actores de cambio en la pospandemia”, sostuvo.

El Congreso Mundial de Mujeres Políticas se ocupó del repensar de los medios de comunicación y los actores de Gobierno en todas sus esferas, por el impacto del Covid-19, que todos conocen cuando comenzó, pero nadie sabe cuándo terminará. “En cada país, hay mujeres, que quieren hacer algo por sus países, regiones y países”, subrayaron la consultora colombiana Viviana Arias y su colega Margarita Lumbreras de México.

Al cierre de la cita académica, la Directora del Congreso Mundial de Mujeres Políticas, la argentina Sandra Dellara, aseveró que desde la virtualidad se logró conocer el aporte de Eva Perón en el fortalecimiento de la democracia desde Argentina. “La mujeres, tenemos el deber de caminar juntas. Hablando de nuestros problemas por solucionar. Con respeto, que trascienda fronteras”, manifestó.

Finalmente, desde Bolivia, la consultora, Daniela Calderón Salazar visibilizó el proyecto “las niñas pueden”. Una apuesta desde la investigación, que se traduce en empoderamiento de este grupo poblacional. “En la que viene, educar a las niñas como eje de la sociedad desde el respeto a la vida y sus derechos, permitirá que lo pospandemia sea menos traumática”, dijo.

Las mujeres del siglo XXI, no han perdido sus sueños. Ese escenario quedó plasmado en cada una de las conferencias y paneles. Escuchar a las mujeres, en tiempo de cuarentena a través de un Congreso Mundial virtual, es una clara muestra de un nuevo tiempo, que confirma que edificar la democracia comienza por la oreja.

Así ocurrió en la Grecia de Sócrates, cuando bajaba a la plaza y se mezclaba entre la gente. Hablaba con ella. Indagaba sobre sus problemas cotidianos. Sin decirlo, jugando a la ignorancia, construyó un nuevo sentido para la democracia. “La pandemia le ha venido bien a las niñas y las mujeres. Es una red de sororidad que apunta a trascender en el tiempo. Una niña empoderada, jamás será maltratada”, remarcó Calderón.