“No es necesario que ella diga lo que hará (Marina) porque Brasil no está desequilibrado, no tiene crisis de divisas. Brasil pasa, al igual que en otros países del resto del mundo, por un proceso de crisis, luchamos como ellos (otros países), y garantizamos el empleo y la inversión”, agregó.

La otra cara de la moneda

Este jueves durante una entrevista, Silva dijo que en el caso de un triunfo en las elecciones del 5 de octubre no promoverá ninguna "aventura" con la política económica del país.

"Nuestro compromiso es mantener la estabilidad económica con la política que tiene como base el trípode de responsabilidad fiscal, inflación bajo control y libre cambio", argumentó.

"Dilma se aventuró y tenemos como consecuencia un país con baja credibilidad, bajo crecimiento, baja inversión e intereses altos que ahuyentan la inversión", dijo.

Afirmó que para que Brasil vuelva a crecer con inflación baja, es necesario generar un ambiente de respeto a los contratos que les ofrezca garantía a los inversores. "Nosotros no vamos a aventurarnos en política económica. Nuestro compromiso es crear un ambiente que favorezca el regreso de las inversiones y eso sólo será posible con un gobierno que cuente con credibilidad", afirmó.

De acuerdo al sondeo Vox Populi, difundido esta semana, Silva se ubica segunda a sólo siete puntos de la actual mandataria que busca la reelección y en una segunda vuelta, Rousseff obtendría el 46 por ciento de las intenciones de voto frente al 39 de Silva.