“No establece ningún mecanismo concreto para incrementar el número de mujeres en cargos de representación y ninguna obligación a los partidos políticos. (…) Resulta inocuo alterar la normativa subvalorando la formación y capacidad que ya tienen las mujeres en el interior de los partidos políticos” expresa el presidente en el documento.

En el decreto también se señala que las instituciones del Estado cumplen a cabalidad con las campañas de concientización que buscan eliminar actitudes discriminativas hacia as mujeres y combaten los estereotipos.

Afirma que la normativa aprobada por el Congreso no crea nuevos mecanismos, no establece nuevos retos ni formas de generar mayor equilibrio en la participación de las mujeres en candidaturas electoral.

La iniciativa que salió de la Cámara de Senadores establecía que en las agrupaciones políticas, las organizaciones intermedias, los órganos colegiados, el Gabinete del Poder Ejecutivo y el funcionariado público se aplique la paridad y la alternancia hombre-mujer.

La Cámara de Diputados eliminó la distribución igualitaria y se concentró en las campañas de concienciación dirigidas a la ciudadanía en general.