Directivos de la Cámara Paraguaya de Exportadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco) reiteraron el pedido a la Cancillería de solicitar la revisión de la medida que deja sin efecto la "Admisión Temporaria" dispuesta por autoridades de Argentina, para los envíos de sojas y otros granos.
La medida del vecino país tiene repercusiones en la parte logística que deriva en retrasos de los embarques.
Levantar la Admisión Temporaria implica, por un lado, que Paraguay no podrá aprovechar la logística argentina, tales como en el caso de puerto Rosario, en momentos en que se avecina una producción récord de granos.
Si no se puede descartar, aunque sea en forma temporal en Argentina, habrá numerosos inconvenientes para el comercio de soja, maíz, girasol, canola y aceites, entre otros.
Fácilmente podrían estar en juego entre 3 y 5 millones de toneladas de granos dependiendo del resultado de la zafra.
Por si fuera poco, los puertos evidencian inicio de congestión y reembarcar a otro destino fácilmente representaría más de un mes de espera, con el sobrecosto que ello implica.
Además del empleo de logística, la Admisión Temporaria tiene sus ventajas fiscales para las industrias argentinas, pues hay una suerte de exoneración de tributos del IVA 21% y del 10% del IVA anticipado y el anticipo a la renta, en el vecino país.
Si el industrial argentino paga, el costo será repasado al productor y la mercadería se encarecerá.
El régimen tiene vigencia desde 2004. Argentina decidió suspenderlo el 4 de abril, pero se logró una nueva prórroga, que ahora puede ser interrumpida otra vez. (www.novaparaguay.com)
