“Hoy nos congregamos en este lugar emblemático, el Cuartel de la Victoria, un espacio impregnado de la memoria viva de aquellos valientes que lucharon en uno de los capítulos más gloriosos de nuestra historia”, expresó Peña.

Subrayó la importancia de este sitio como un emblema de la resistencia paraguaya, destacando que “sus muros resguardan el espíritu de una generación que dio todo por la patria, defendiendo con coraje nuestro territorio”.

El mandatario enfatizó que la conmemoración del 12 de junio no exalta la guerra, sino el logro de la paz tras años de conflicto en el “infierno verde” del Chaco.

“No celebramos el enfrentamiento, sino el cese de las hostilidades, el acuerdo entre dos pueblos hermanos que decidieron construir un futuro de entendimiento y cooperación”, afirmó, refiriéndose al compromiso de Paraguay y Bolivia por superar las diferencias tras el conflicto.

Peña llamó a preservar el legado de valentía y amor a la patria dejado por los héroes chaqueños. “Este cuartel es un santuario del heroísmo paraguayo. Nos corresponde ahora honrar su memoria, transmitiendo a las nuevas generaciones que el verdadero patriotismo radica en defender lo justo, no en el rechazo al otro”, señaló.

Instó a las Fuerzas Armadas y a la ciudadanía a proteger los valores de entrega y sacrificio que marcaron esa época, asegurando que la paz alcanzada es un legado que debe cuidarse con compromiso y unidad.