Insólito: una diputada vendió su mansión durante el control patrimonial obligatorio y la CGR la detectó
La diputada cartista Johana Vega Insfrán quedó bajo fuerte cuestionamiento tras quedar en evidencia una serie de movimientos registrales que coincidieron con el examen de sus declaraciones juradas por parte de la Contraloría General de la República (CGR).
En medio del control, la legisladora transfirió una mansión en construcción ubicada en Mariano Roque Alonso, una operación que terminó desnudando inconsistencias frente al ente de control.
La propiedad, situada en el barrio Defensores del Chaco, fue adquirida por Vega Insfrán el 29 de abril de 2024 y registrada en setiembre del mismo año. Meses después, y tras una publicación periodística que expuso el avance de la obra, la CGR anunció la apertura del examen de correspondencia patrimonial.
La diputada sostuvo entonces que solo había sido dueña del terreno y no de la construcción, porque supuestamente lo había vendido.
Sin embargo, los documentos oficiales contradicen esa versión. El 25 de marzo de 2025, ya con el análisis en curso, el inmueble fue transferido a GI Proyectta EAS, empresa vinculada a su prima María Gabriela Insfrán.
La inscripción se concretó recién el 22 de abril de 2025, cuando la Contraloría aún evaluaba las DD.JJ. La firma, dedicada principalmente a cartelería, arrastra numerosos reclamos por deudas millonarias, según registros comerciales.
La operación resulta aún más sugestiva por el monto declarado por la diputada: G. 250 millones por el terreno, sin considerar la construcción. Antes de que la CGR cierre el examen, el inmueble volvió a cambiar de manos y fue retransmitido a Sur SRL, donde figura como “beneficiada” otra firma privada.
ABC intentó contactar a la legisladora y a su prima, sin obtener respuesta. La CGR también detectó posibles inconsistencias en las DD.JJ. de Vega Insfrán y de su pareja, Eddie Jara, mientras continúa el proceso de verificación patrimonial.
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