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Otro capítulo de la novela por la "bendición"

La imagen de la desesperación: el luguismo "disidente" publica una foto con su líder convaleciente y en recuperación

Lugo y los concertacionistas en el patio del Fleni.

Lo subieron a una silla de ruedas. Lo sacaron un ratito al patio. Le pidieron que dijera “whisky”(o quizás “ron”, su destilado preferido), que levantara un poquito la mano y ¡“clic”! a las redes. A esto se limita la sesuda y trabajada estrategia electoral del luguismo concertacionista y “disidente”.

La mayoría de los medios analizó la imagen con riguroso sesgo electoralista; tanto ABC como UH eligieron la palabra “reaparece” para titular la noticia generada desde la cuenta de tuit del expresidente.

Si la imagen compartida se analiza desde la realidad y no desde el deseo político no se ve un Lugo en condiciones de hacer campaña. Y mucho menos posición de asumir su banca si es electo. No por nada en el extremo derecho de la foto se ve sonriente a Marcos Fariña, abogado y eventual reemplazo en caso de que el exobispo se vea imposibilitado de aceptar su curul al ser suplente uno de la poco democrática y sumamente masculina lista del FG.

Acompañan al líder convaleciente en la foto tomada en el patio de la clínica Fleni; Carlos Filizzola, Esperanza Martínez, Pedro Santacruz y el yerno de oro “Luis Paciello, entre otros.

No sería de extrañar que Jorge Querey, Kencho Rodríguez y Euclides Acevedo ya estén armando viaje para Buenos Aires con el mismo objetivo.

La novela por la bendición luguista no solo expone las miserias de la política vernácula sino que evidencia la falta de liderazgos e imaginación a la hora de ejecutar una campaña.

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